domingo, 25 de abril de 2010

Los relatos paganos, en librerías


El pasado 14 de abril, en el Centro Cultural Mexicano, tuvo lugar la presentación del libro Los relatos paganos.


Los relatos paganos es una colección de seis cuentos:


Los ladrones

Los pobres

Los filósofos

La granja

El castillo

El amor de yu (Premio de cuento EUNED, 2008)


José Pablo Medrano estrenó el poema Monte Ábora, una relectura del cuento El amor de Yu.


Gustavo Solórzano Alfaro ofreció una reseña crítica sobre el libro y la estética de L.A. Bedoya.


Juan Carlos Olivas presentó el poema El castillo, basado en el cuento del mismo nombre.


Mario Alfagüell estrenó la obra Los ladrones, composición narrativo-musical con textos del cuento Los ladrones.


Cristofer Arias y Mario Alfaro expusieron dibujo, bocetos y óleos sobre el tema de La granja y Los filósofos.


Finalmente, Luis Antonio Bedoya apareció y leyó el cuento Los pobres.


Gracias a todos los que nos acompañaron a la presentación de Los Relatos Paganos, como siempre... ¡teatro lleno!


Gracias a los escritores amigos que me acompañaron en este trance.

Gracias a los grandes artistas que me hicieron este inmerecido homenaje.

Gracias a mis lectores inclaudicables...

A mis viejos y nuevos discípulos...

A mi familia

A las nuevas caras, que me recuerdan la vida,

A todos aquellos que me ayudan a levantar esta copa de sombras.


Luis Antonio Bedoya

miércoles, 7 de abril de 2010

Premier de Los relatos paganos


Llegó un triste hombre a mi puerta. Era temprano, apenas anochecía. Abrí con desgana, con repugnancia miré al hombre. Era muy pobre y había dolor en la mueca lisonjera que me ofrecía. Se agarró al portón como una hierba. Era pobre y triste. Hastiado, lo dejé allí y fui por unas monedas. Al volver, los ojos del patán se habían transformado en unos rubís iridiscentes, hijo de un demonio. Su sonrisa, ahora máscara de esqueleto, se agitaba como un carro desvencijado. Bajé la mirada pues sus manos algo me mostraban. Era un saco... un saco mugroso. Abrió la boca del saco ante mí. Me atenazó un gran terror, un flébil espasmo, un hondo amargor, un estupor helado, una rara angustia, un deseo lóbrego, una demente lubricidad, la peligrosa lujuria de un sátiro en la fronda. Lleno de espanto azoté la puerta en sus narices. Creo que tomé mucho vino esa noche, con la mente emponzoñada, con el corazón erizado. En el scriptorium, aparecieron unos dibujos obscenos, aparecieron nada más... Doncellas encadenadas a perros lascivos, metragirtes en libaciones brutales bajo rosados vírgenes de crines encendidas, ciudades fulgurantes donde moría una orgiástica mulchedumbre entre las nebulosas del incendio. En la corona del papel, había una guirnalda ensangrentada y una leyenda que decía:


He aquí que volveré de las estepas húmidas

a celebrar la vieja danza de las estaciones

y mi reino no tendrá fin...


Amigos, estos son LOS RELATOS PAGANOS, mi ópera prima. Inmerecidamente y expectante, convoco a mis hermanos y hermanas a probar los frutos de un jardín enfermo.


Miércoles 14 de abril,

Centro Cultural de México, Los yoses,

7:00 pm.